El viernes se dieron por acabados todos los trabajos de preservación que han servido para poner en valor este espacio histórico de la localidad
La capilla de Santa Victoria ya se encuentra restaurada después de los trabajos que se han desarrollado en los últimos meses. Las tareas han consistido en el saneamiento del interior de la capilla y la restauración de las pinturas datadas del siglo XIX, además de acometer tareas de mantenimiento del edificio para eliminar las filtraciones de agua y las humedades. Por otro lado, también se han eliminado los elementos no eran propios del edificio como el cableado obsoleto y el pavimento de madera.
En cuanto a la sustitución del suelo, ha sido una de los trabajos más laboriosos que incluso han supuesto atrasar el ritmo de los trabajos. En este caso, después de varias intervenciones se descubrió el pavimento cerámico original procedente de las fábricas de Onda entre el 1850 y 1860 decorado de forma manual. A pesar del mal estado de conservación los técnicos pudieron recuperar suficientes fragmentos para colocar uno nuevo siguiendo el diseño original de la época.
Hay que destacar que durante la restauración se descubrieron pinturas de arquitectura fingida en la fachada de la capilla, similares a las que hay en la iglesia arciprestal, un descubrimiento datado del siglo XVIII que también se ha preservado. Así mismo en el interior del edificio también se han sacado a la luz pinturas que muestran que la capilla se usó como escuela infantil al 1830.
Las obras han contado con un presupuesto de 208.696€ cofinanciado por la Generalitat Valenciana, a través del fondo FEDER con la cantidad de 86.000€, la Diputación de Castelló con 4.311€ y el mismo Ayuntamiento de Vinaròs con una inversión hecha con recursos propios de 118.146€.
El concejal de Urbanismo, José Chaler, ha destacado que “la capilla de Santa Victoria está catalogada como Bien de Relevancia Local y por tanto su preservación era una de las prioridades del Gobierno Municipal”. En este sentido, añadía que “ahora el objetivo es aprovechar este lugar emblemático de la localidad para convertirlo en un nuevo espacio cultural para acoger exposiciones, charlas o incluso conciertos en pequeño formato”.
La regidora de Cultura, Anna Fibla, ha incidido que “estas obras han permitido recuperar un espacio histórico con un gran valor artístico y cultural”.